VICENTE PALLOTTI, UN MÍSTICO CON ESPÍRITU UNIVERSAL 1
SAN VICENTE PALLOTTI FUE UN MÍSTICO, UN SANTO DEL INFINITO, UN ALMA NOBLE CON ESPÍRITU UNIVERSAL.
Durante su vida en la pequeña área geográfica de Roma su alma trascendió todas las barreras y límites, volando con una grandiosa libertad. El experimentó a Dios como infinito amor y misericordia.
Nunca fue un misionero en tierras lejanas, pero fue profundamente misionero en su alma. La Ciudad Eterna de Roma, con sus peregrinos y misioneros de todo el mundo, le dio el sentido de un mundo fuera de esa ciudad, y del inmenso trabajo de evangelización que espera a la Iglesia.
Si bien había mucho por hacer por los pobres en Roma, él siempre fue consciente de la inmensidad de actos de misericordia tanto espirituales como corporales necesarios para saciar las necesidades espirituales y físicas de millones de personas en otros lugares del mundo. El deseo de “convertirse en todo para todos” fue lo que marcó su orientación mística.
Cuando hacemos algo por nuestros hermanos más pequeños, estamos cumpliendo el deseo de nuestro Fundador de volverse comida para el hambriento, agua para el sediento, ropa para el que está desnudo, y medicina para el enfermo. Estos pensamientos vienen a mi mente como resultado de mis visitas a muchos países alrededor del mundo; de hecho, el pueblo de Dios está esperando para acoger el espíritu y carisma universal de San Vicente.
En Brasil, las hermosas experiencias de la Iglesia en comunión con las parroquias de nuestra pastoral son una reafirmación de la visión eclesial de Pallotti: todos los bautizados- y cada persona creada a la imagen y semejanza de Dios- comparte la misma dignidad. De ahí que todos seamos corresponsables por la misión de la Iglesia.
No olvidemos sus palabras: “ya que todos estamos obligados a imitar a Jesús, todos estamos llamados a ser apóstoles”.
Fue impresionante en nuestra Provincia de San Pablo encontrar nuestras parroquias viviendo a la altura de la visión de nuestro Fundador. Celebrando juntos la Misa con el sacerdote, alrededor del altar había hombres y mujeres adultos, jóvenes, y muchos niños pequeños ejerciendo el ministerio que Dios les ha dado en medio de todos los fieles de la Iglesia.
En Venezuela, encontré una pareja mayor haciendo la colecta de los domingos; eso también es apostolado. Porque, incluso una persona enferma, desde su cama de hospital, puede procurar la misión de Jesús ofreciendo su dolor como un sacrificio de expiación por los pecados!
TODOS PUEDEN SER APOSTOLES, Y TODO PUEDE SER APOSTOLADO, SIEMPRE QUE HAGAMOS TODO POR LAS MÁS GRANDES MOTIVACIONES: LA MAYOR GLORIA DE DIOS Y LA SALVACIÓN DE LAS ALMAS!
Este es el concepto de San Vicente Pallotti del Apostolado Católico. En otras palabras, es la llamada universal a la santidad en nuestra vida cotidiana. “Los tipos y llamados de vida son muchos, pero la santidad es una.” (Lumen Gentium)
Viajando todavía en Sur América, el staff y los estudiantes de nuestras escuelas Argentinas son Palotinos en espíritu!. Ellos conocen y aman a nuestro Fundador, y se sienten profundamente honrados de ser “Palotinos”. Pero no debemos olvidar que al otro lado del mundo, los jóvenes que asisten al prestigioso Colegio de Ingeniería San Vicente Pallotti de Nagpur conformado por muchos estudiantes no cristianos- están orgullosos de ser niños Palotinos, de hecho, las 50 escuelas en India bajo el nombre “San Vicente Pallotti”, tienen su carisma.
El pensamiento que viene a mi mente es que la cosecha de hecho fue realmente grande, y cuánto necesitamos más pastores para inculcarles el espíritu apostólico de Jesús. Nuestra gratitud va para nuestros hermanos, quienes hacen inmensos sacrificios para asistir las necesidades pastorales de las personas. El sacerdote de una parroquia es el pastor de todas las personas, y en cada parroquia hay muchos movimientos y grupos.
Tal como es ahora, un sacerdote Palotino no es solamente para los Palotinos o los miembros de la Unión, él es como muchos autobuses que recorren las ciudades, dando testimonio de nuestro gran Santo Romano; el, cuyo espíritu trascendió los límites de nacionalidades y religiones, un santo real del ecumenismo y el dialogo interreligioso.
Durante mi más reciente visita a Colombia y Venezuela en noviembre, los hombres y mujeres laicos que encontré mostraron el gran atractivo que la Espiritualidad Palotina tiene para todo su rebaño. Son ministros de la Iglesia y también hijos espirituales de San Vicente. Su rol es ser sal apostólica en su comunidad, al igual que todo Palotino genuino, sin importar si él o ella es un sacerdote, hermana religiosa o laico.
Es realmente hermoso ver a las personas en el Este de Asia, con un profundo y delicado sentido religioso y espíritu de contemplación, enorgulleciéndose de ser pastoreados por misioneros Palotinos de tierras lejanas. Ellos nos enseñan a ser amables y respetuosos con los otros, y con toda la creación; este es el misticismo oriental. Los trabajos hechos por los
jóvenes, incluso en nuestra misión fundada más recientemente en Vietnam, nos inspiran.
Las iglesias completamente llenas en nuestra provincia Africana, llenas con hermosos cantos que nos enseñan a alabar a Dios desde el corazón. La liturgia Africana no se limita a seguir simplemente las directrices; la realidad que viven hace que la oración sea auténtica.
Así también, nuestras entidades en Europa y América del Norte, apoyan misiones globales con personas, fondos y una gran pasión por el evangelio, así como trabajan en sus propias misiones; fomentan el enfoque universal de “educar la conciencia acerca del sentido de responsabilidad que pesa sobre todos y cada uno de nosotros, especialmente aquellos más bendecidos con los bienes del mundo”. (Juan XXIII, Mater et Magistra)
Escribo estas líneas precisamente para mostrarles los anhelos, luchas y alegrías. ¿No deberíamos agradecer a nuestros sacerdotes y religiosas, quienes hacen enormes sacrificios para establecer nuestro carisma en esos países?. Sus esfuerzos dan abundantes frutos.
Como podríamos agradecer a las personas en el pequeño país de Eslovaquia, quienes ayudan en el cuidado y educación de cientos de niños necesitados alrededor del mundo? Ese es el espíritu y carisma de nuestro Fundador: uno muy universal. San Vicente, el místico de Roma, no puede y no debe ser encerrado en una caja, o reducido a estructuras estrechas. Esa es la mejor forma de cumplir con la naturaleza universal de nuestro carisma. Nuestro objetivo entonces, no debe ser sólo crear un pequeño mundo desprovisto de inconformidades por el bien de nuestra propia paz. Nosotros debemos ser y formar auténticos apóstoles de Jesús, para el servicio de la única Iglesia de Jesucristo. Esta es la regla fundamental, y que noble visión nos ha sido confiada por nuestro Fundador.
Como los setenta y dos “discípulos misioneros” que fueron enviados a predicar, sanar y alimentar al pueblo de Dios en todos los rincones del mundo, los hijos e hijas espirituales de Pallotti están en un atrevido viaje al mundo! Bajen de los balcones y lleven el amor de Jesús a las calles, porque un alma que se salva hace que nuestra vida valga la pena. Cuando
pensamos en la inesperada discusión entre los discípulos acerca de quién era el más grande entre ellos, recordamos que los hijos de Zebedeo querían sentarse uno a la derecha de Jesús y otro a la izquierda en Su Reino. Esto sucede como resultado de la ambición humana, y no tiene nada que ver con un verdadero discipulado. Si existe este tipo de pensamiento entre los seguidores espirituales de Pallotti, seamos claros: estamos pensando en un reino terrenal que es transitorio y carente del Espíritu Santo. San Vicente no sería parte de esto!
Nuestra Iglesia y nuestro mundo son nuestro campo de acción. No creamos estadios privados para jugar fútbol entre nosotros, lejos del caos que nos rodea. No hay lugar para ese tipo de clubes recreativos en el Reino de Jesús. Si deseamos buscar alegría perdurable, esto solo sucederá cuando involucramos en nuestro juego a los niños de la calle.
VE A LAS FAVELAS DE BRASIL. VE A LOS BARRIOS DE ESCAZOS RECURSOS. ALLÍ ES DONDE LA COPA MUNDIAL REAL SE JUEGA.
El juego final es la expresión del infinito amor y misericordia de Dios hacia todos los atletas del mundo, especialmente los más necesitados. Dejemos que el espíritu universal de Pallotti juegue los 90 minutos completos. Y nosotros, que estamos llenos de su amor y pasión, no nos desanimemos nunca, sino que revivamos y reavivemos la caridad en los corazones de miles de personas en todo el mundo.
PADRE JACOB NAMPUDAKAM SAC
RECTOR GENERAL
SAN VICENTE PALLOTTI, MÍSTICO Y APÓSTOL, HAZNOS AUTÉNTICOS Y UNIVERSALES DISCÍPULOS MISIONEROS DE JESÚS.