
DÍA 1
“El Espíritu Santo, que es el Amor infinito del Padre y del Hijo, esté siempre en nuestra alma”.
“En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.”
ORACIÓN INICIAL
“Señor, que tu gracia inspire, sostenga y acompañe nuestra (mi) oración y acción; para que todo comience en ti, como en su fuente, y tienda siempre a ti, como a su fin. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén”.
TEMA DEL DÍA
“Orar por mí y por los demás”
El hombre conoce muchas formas de oración: Jaculatorias o invocaciones, la oración del rosario, el admirar y meditar un cuadro o imagen, la oración con la Sagrada Escritura o con los textos de un devocionario, la oración desde el interior de uno mismo, o el estar en silencio ante Dios.
La naturaleza a unos los conduce fácilmente a la oración. Otros necesitan del grupo y de la comunidad al rezar. Hay quienes expresan la alabanza y la acción de gracias en el canto o con la música.
Yo, ¿por qué oro? ¿Por una determinada necesidad o en acción de gracias por una ayuda recibida? ¿Oro por mí mismo, por mi familia y mis parientes, por los hombres agobiados de mi entorno o por las necesidades de todo el mundo?.
En la oración Dios me ofrece su presencia y aviva mi pensamiento y acción. Me colma de tal modo, que soy capaz de ser una bendición para los demás. (silencio – reflexión)
Vicente Pallotti nos aconseja: Dirige ya temprano tus primeros pensamientos hacia Dios con invocaciones fervorosas. Ora con devoción, en silencio y con recogimiento. Acuérdate siempre de la presencia de Dios. Ten tiempo para dar
gracias. A lo largo del día, acuérdate repetidamente de la presencia de Dios. Tómate tiempo para leer y meditar un capítulo o 10 a 20 versículos del Nuevo Testamento. Piensa, entonces, también en tu quehacer cotidiano, en tener un silencio que anime tu interior. El silencio nos dispone a la oración. Quien no ama el
silencio y la oración, no quiere de hecho la unión con Dios. Antes de retirarte al reposo, examina tu conciencia y ora. Por amor a nuestro Señor Jesucristo, esfuérzate seriamente por crecer, día a día, en santidad y en perfección. Y déjate llevar por el perfecto amor a Dios y al prójimo.
En el libro de Tobías se lee: “Bendice al Señor Dios en toda circunstancia, pídele que sean rectos todos tus caminos y que lleguen a buen fin todas las sendas y proyectos”. (Tb 4, 19)
(ORACIÓN PERSONAL)
PRECES:
Padre del cielo, tu Espíritu nos enseña a orar: Haz que cantemos tu alabanza de todo corazón.
(Roguemos al Señor)
Tu Espíritu Santo es el espíritu de la virtud y de la fortaleza: Haz que reconozcamos y llevemos a cabo los impulsos del bien.
(Roguemos al Señor)
ORACIÓN A SAN VICENTE PALLOTTI
L.- San Vicente Pallotti, tu vida ha estado marcada por Dios, el Amor infinito. Te has puesto enteramente a su servicio.
T.- Has estado a disposición de quienes buscaban consejo y consuelo:
de los sanos y de los enfermos,
de los jóvenes y de los adultos,
de los pobres y de los ricos…;
en fin, de todos los hombres de cada grado, estado y condición. Todos te eran importantes. A todos querías entusiasmarlos por el Reino de Dios; a cada uno le querías recordar su tarea de apóstol; de todos reclamabas su disposición al apostolado.
L.- A ti, san Vicente Pallotti, te llamamos (llamo). Pedimos (pido) tu intercesión. ¡Enséñanos (me) a orar. Ayúdanos (me) a rezar y a pedir lo que realmente necesitamos (necesito), lo que de verdad nos (me) hace falta, lo que sirve para la gloria de Dios, y para nuestro (mi) bien y salvación.
T.- Tú has recibido de Dios tantas gracias y dones. Siempre se los agradecías antes de recibirlos: como si tu oración ya hubiera sido atendida.
L.- San Vicente Pallotti, Presenta nuestras (mis) súplicas ante Dios. Sé nuestro (mi) auxilio en la oración, que a Dios Padre dirigimos (dirijo) por Jesucristo, nuestro Señor.
T.- No nos (me) dejes sin tu ayuda. Danos (me) tu bendición. Sé nuestro (mi) guía hacia Jesús. Condúcenos (me) al Padre. Amén.
(Se puede añadir o disponer de otro modo).
CONCLUSIÓN
L.- Nos (me) bendiga y nos (me) guarde a nosotros (mi). Y a todos nuestros (mis) seres queridos. (en especial a…), el Dios todopoderoso, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
T.- Amén.
L.- Santa María, Reina de los Apóstoles.
T.- Ruega por nosotros.
L.- San Vicente Pallotti,
T.- Ruega por nosotros.