LABOR EN MEDELLÍN Y BOGOTÁ
El Ministerio Laicos de la Divina Misericordia, nace de una necesidad actual de acompañamiento integral de los enfermos, haciendo énfasis en ofrecer ayuda en las necesidades espirituales, no sólo del enfermo sino también de su familia. Nace como una respuesta a la realidad que enfrentamos de lo descartable que se vuelve para la sociedad el débil y enfermo, y de lo desalentador y solitario que puede resultar a veces para una persona el estar atravesando por una enfermedad o enfrentarse a la vejez.
Durante el rezo de la coronilla de la Divina Misericordia en el año 2013 la señora Nubia Barón Mantilla siente el llamado del Señor a ejercitar de manera práctica esta Divina Misericordia en la ciudad de Medellín, lo que, después de acompañamiento espiritual y un proceso de discernimiento, decidió empezar a realizar, como respuesta a este llamado a servir a Dios por medio del ejercicio de la Misericordia con los hermanos más vulnerables.
El Ministerio encuentra su basamento en la parábola del Buen Samaritano (Lucas 10, 25-36) y su obra consiste en dar a conocer la Misericordia de Dios mediante el acompañamiento espiritual que se realiza. Por medio de la lectura de la Palabra, el preparar a las personas para una buena confesión, resaltando siempre la importancia de la oración se realizan encuentros tres veces al mes, evaluando también las experiencias vividas en las visitas realizadas.
Es un Ministerio que nos recuerda lo valiosos que somos todos, y que ese valor no depende solamente de mi capacidad de producir determinadas cosas, sino que mi valor lo recibo por haber sido planeado por Dios, porque cada día que tenemos de vida es un don de grandeza incalculable.
También se encarga de promover la devoción a la Divina Misericordia a través de la formación, utilizando los medios de los que disponemos en la actualidad como son los programas radiales y televisivos.
